lunes, 17 de agosto de 2015

Empire State of Mind (+7)

Dear World,

Decir adiós nunca ha sido fácil. El 11 de Agosto le tuve que decir adiós a mi famlia, mis amigos, mi tierra y mi hogar. Me despedí de mis seres más queridos con un fuerte abrazo y un "nos vemos en 10 meses".

El 11 tenía la alarma puesta para las 8, pero me desperté a las 7. Mientras me estaba preparando para ir al aeropuerto con más que mariposas en el estómago, apareció mi prima por casa para recoger las llaves que se había dejado olvidadas en mi mochila y mis padres la invitaron a venir al aerpuerto.

La primera despedida fue la de mi perrito Casper (con el que llevaba viviendo 6 años) porque no lo podíamos llevar al aeropuerto. Mi madre y mi prima me sacaron las últimas fotos en casa y en cuanto cerré la puerta supe que la aventura había empezado.


Llegamos al aeropuerto y tenía los nervios a flor de piel. Me enconté con Andrea en el aparcamiento y nos pusimos juntas con nuestas familias en la cola de facturación, donde Ana María nos dio el billete para Madrid y comprobó nuestra documentación. Después de saludar a mis amigos me tocaba facturar y mi maleta de mano se pasaba un poco del máximo (sí, la de mano) pero creo que le di la suficiente pena a la chica para que lo dejara pasar.

En ese momento, aparecieron Aida y Candela (muy buenas amigas del insti) y nos dirigimos hacia unas sillas para esperar a embarcar. A las 11:35 nos acercamos a la zona de embarque y, entre lágrimas, abracé a mis amigas, a mi prima y a mis padres y me uní a los becados que ya estaban en el control. Justo antes de subir las escaleras mecánicas, no pude evitar darme la vuelta para darle un último adiós a mi familia. Fue duro pero sabía que no había vuelta atrás.



El primer vuelo fue un poco aburrido pero fui escuchando música y hablando con otros becados. Llegamos a Madrid a las 13:30 y estuvimos como 1 hora más pasando controles. Nos dejaron un rato para comer y Pablo, Andrea, Area y yo nos sentamos en una mesa de un sitio un poco raro y comimos unos bocatas. Más tarde tuvimos que pasar el último control antes de embarcar y escogieron gente al azar para hacerles un control especial (cachearles y eso) y no tengo ni idea de por qué, escogieron a Andrea (qué raro). Luego estuvimos jugando al UNO antes de embarcar y a las 17:30 despegó el avión que nos llevaría a América.

El vuelo duró 8 horas y nos dió tiempo a hacer de todo. Estuve hablando con Anxo, que estaba a mi lado, y escuchando música. Nos trajeron la comida y en eso ya se fue un buen rato. Luego me levanté, di paseos por el avión y estuve hablando con Adri, Andrea, Pablo, Claudia, Miguel y más gente durante unas 2 horas. Leí, escuché más música, comimos otra vez y aún quedaban varias horas para aterrizar. Cada vez que nos levantábamos nos dedicábamos a escapar de las azafatas con carritos. Di más paseos sin sentido con Pablo y sacamos fotos. El Jet Lag fue potente, ya que habíamos perseguido el sol durante 8 horas, así que cuando por fin vimos tierras americanas, eran las 2 de la madrugada en España mientras que en NY eran las 8 de la tarde.

Nostros todo contentos por haber aterrizado, tuvimos que esperar otra hora más sentados porque el avión no tenía dónde aparcar. Intenté dormir pero me fue imposible.

Rico rico
Sí, de esto escapábamos


Esta foto es necesaria

 No sé cuánto tiempo más tarde y ya muertos del cansancio, llegamos al hotel, donde nos dieron unas camisetas, las llaves de la habitación y más papeles. Yo fui en la habitación con Andrea y Claudia y como nuestras tarjetas no funcinaban tuvimos que esperar a que nos dieran otras.

Al día siguiente bajamos a desayunar a las 8 y fue todo muy americano.



Muy normales




Más tarde nos dividieron en grupos por colores. Primero hicimos juegos y actividades para conocernos entre nosotros, ya que en hotel había estudiantes de todo el mundo (alemanes, tailandeses, polacos, brasileños...), y luego vimos un vídeo que nos recordaba las normas y como detectar el acoso sexual.

Por la tarde, con dos bocatas del Subway y las cámaras preparadas, nos dirigimos en bus hacia lo que todos esperábamos: New York City. No tengo palabras para describir lo increíble que es, y cuando nos subimos al Empire State Building, no podia apartar la vista de los rascacielos. En serio, es impresionante.


Madison Square Garden








Galicia rules









Más tarde fuimos a una tienda de souvenirs en la Quinta Avenida donde me compré una sudadera, un llavero y una matrícula de Broadway. Por último, subimos a un barco para dar un "paseo" por el hudson y ver la Estatua de la Libertad. Fue absolutamente impresionante y nos lo pasamos genial. Estuve sacando fotos y cené en 5 minutos para volver a la cubierta lo antes posible. Ya cuando volvíamos, nos pusieron música de pachangueo y, como no, todos los españoles nos pusimos a bailar en mitad del barco mientras el resto de estudiantes nos sacaban vídeos y fotos. Ese momento fue increíble.









No sé a qué hora volvimos al hotel, y estuvimos como una hora tirados en el hall para que nos dieran los billetes nacionales. Cada uno tenía que estar en la entrada a una hora determinada dependiendo de la del su vuelo de salida; y como no yo siempre con tanta suerte, tuve que estar a las 3:45 de la mañana. Al final dormí 2 horas.

Una de las peores cosas ha sido despedirme del resto de becados, pues están viviendo lo mismo que yo y son un gran apoyo, a parte de que he hecho grandes amigos.

El 13 de Agosto de madrugada, me encaminaba en un bus hacia el Newark Airport, donde una coordinadora de CIEE nos ayudó a facturar y nos dejó solos para pasar los controles y coger el avión. Como he dicho antes, tengo muy buena suerte y me tocó ir sola en el avión, pero me encontré con un tailandés que hacía lo mismo que yo. Así que a las 6:40 me subí al avión, hice escala en Detroit y finalmente llegué a Madison, la capital de Wisconsin.

Allí me encontré por primera vez con mi host family, que es maravillosa. Llevo con ellos 5 días, pero eso es para otra entrada. Sólo quiero decir que no podría haberme tocado una mejor, me ayudan y son muy generosos.

My host sisters Sam, Sarah and Beth, and me.
See you, viajeros!

lunes, 10 de agosto de 2015

Día 0

Dear world,

Recuerdo que hace meses, miraba mi móvil y veía que quedaban 120, 100, 60, 30 días. Recuerdo que el día de la última reunión en España un representante de FSL (supongo, en realidad no sé quién es) nos preguntó "¿Qué os dice el número 53?" y Brais, tan oportuno como siempre, gritó: "¡Los días que faltan!".

Entonces faltaban 53 días, y ya habían acabado las clases. Todo ese tiempo he estado esperando con impaciencia el día de hoy, deseando irme y empezar esta aventura; y hoy, que por fin ha llegado, en gran parte no quiero irme.

Todo lo que dejo atrás, mis padres, mi familia, mis amigos, mi casa, mi rutina, mi instituto y prácticamente mi vida, es mucho para mí ahora mismo. Sé que tengo que pensar en el futuro y no mirar atrás, pero se hace difícil cada vez que sé que será la última vez que vea a un amigo o familiar en diez meses. Sin embargo, me llevo una gran cantidad de ganas, ilusión, dos maletas que no sé cómo moveré y a mi misma, ¡que ya le llega!

Estos últimos días han estado llenos de despedidas y más despedidas. He decidido que soy pésima para despedirme, siempre acabo llorando y me cuesta separarme de la persona. Ahora que estoy a nada de irme, sólo puedo pensar en cuánto voy a echar de menos todo esto, sobre todo a mis padres, que son los que me apoyan en todo y se preocupan siempre por mí.

Que conste que no sólo siento pena, también una emoción que me recorre todo cuerpo cada vez que pienso que me voy. ¡ES QUE ME VOY! Dentro de 24 horas estaré no en un avión cualquiera, sino en EL AVIÓN, lo que sé que será difícil aunque sólo sea caminar, cruzar una puerta y sentarme en un asiento.

Y ahora voy a subir fotos de estos últimos días, que han sido bastante intensos.





Gracias


 La próxima entrada que escriba ya será desde Estados Unidos. No sé cuánto dormiré esta noche, aunque no creo que mucho. Nos vemos, viajeros!


martes, 28 de julio de 2015

Hello Wisconsin! (-14)

Dear world,

¡TENGO FAMILIA! Justo ayer, recibí un correo de Ana María anunciándome que ya tengo host family nada más y nada menos que en Wisconsin.

Mi familia son los Kaveggia, formada por mi host mum Julie, mi host dad Francis y tres hermanas: Sarah (20), Beth (18) y Samantha (14). Viven en una casa enorme de Janesville, de unos 63000 habitantes, y que está a casi dos horas de Chicago. Increíble.





Iré al Craig High School con mi host sister Samantha; lo que me parece genial, puesto que el instituto tiene 1800 alumnos y voy a andar un poco bastante perdida. En mi High School hay un montón de clubes y deportes, y entre ellos está el Poms Dance Team, que es un grupo de baile, en el que está Samantha y al que creo que yo podré apuntarme también. La mascota del High School es un tigre y la verdad es que es muy molón. Y empiezo las clases el 1 de Septiembre, así que tengo 20 días de vacaciones!







Además, está el Dance Attitudes Studio, una academia de baile a la que creo que va Samantha dos horas todos los días. Y tienen un cachorro de Golden Retriever muy mono, por cierto! Por sumar ya más cosas, estoy a dos horas y media de Ana y a media hora de Edu, dos compañeros becarios.

La verdad es que estoy muy contenta con mi familia y creo que no me ha podido tocar una mejor. Estoy deseando conocerlos y ya estoy en contacto con ellos, sobre todo con mi host mum. Como dije en la entrada anterior, la espera ha merecido la pena!